lunes, 15 de enero de 2018

LA EPIFANIA DEL SEÑOR

LA SALVACIÓN DE DIOS LLEGA PARA TODA LA HUMANIDAD






Durante los días previos a la Navidad, compartimos con nuestros lectores algunas de las profecías que se cumplieron en nuestro Señor Jesucristo; una de ellas fue ''La profecía de la estrella''. El libro de los Números (24, 17), dice: '' Lo veo, aunque no para ahora; lo diviso, pero no de cerca: de Jacob avanza una estrella, un cetro surge de Israel'', Las estrellas son uno de los más antiguos instrumentos de navegación;  ellas llevaban a puerto seguro a los navegantes en el océano y servían de guía en el desierto, donde la oscuridad y soledad son casi absolutas. Esta profecía se cumple en el pasaje de la manifestación a los Sabios de Oriente: ellos vieron una estrella poco común y la siguieron hasta el pesebre en belén.


La belleza de la estrella navideña está en lo que revela: un humilde Niño nacido en un pesebre a quienes estos Sabios reconocen como el Rey de los Judíos. ¿Cuantas estrellas encontramos en nuestro camino que nos hablan del amor de Dios? ¿Cuantas otras quieren llevarnos por caminos poco seguros? El Rey de los judíos no se hizo presente en el destello del palacio, sino que llegó al mundo en medio de la mayor humildad posible: un pesebre en Belén, una ciudad pequeña y poco importante de la época. Los Sabios de Oriente llevaban sobre su espalda el peso de un largo viaje, pero no se desanimaron al no encontrar lo que buscaban con Herodes, sino que continuaron su camino hasta llegar al lugar menos imaginado. La sensibilidad del corazón de los Sabios fue tan  grande que, aun cuando no conocían a Yahvé nacido su meta, el cumplimiento de sus esperanzas.


La Esperanza es la fiesta de la apertura del misterio de la salvación, pues los hombres que llegan al hogar de la Sagrada Familia no son judíos, sino ''Sabios provenientes de Oriente'',  de tierras lejanas: son paganos, tienen culturas, creencias y formas de comprender el mundo diferentes a las de los judíos. Toda cultura dirige y revela algo del Señor, por esto los Sabios no se quedaron con Jesús, sino que volvieron a su mundo, sabiendo que la salvación había llegado para todos. Así lo contaron los ángeles sobre el portal de Belén: '' Gloria a Dios en el Cielo y en la tierra paz a los hombres de buena voluntad'', Con Jesús, el amor de Dios y su plan de salvación dejan de ser exclusivos de un pueblo, de una élite, y se convierten en un regalo para toda la humanidad.






LOS DONES OFRECIDOS AL SEÑOR






Al estar en presencia del Niño, los Sabios se postran ante Él y lo adoran, gesto de reverencia dirigido a Dios y al rey, Los dones que estos hombres entregan al Señor son simbólicos: el oro, el incienso son mencionados por el profeta Isaías (60, 6) como aquellas ofrendas que los pueblos del mundo tributarán al Dios de Israel, La mirra aparecen en el Evangelio de San Juan, cuando Nicodemo se dirigía a embalsamar el cuerpo del Señor. '' La Iglesia ha visto representados en estos tres dones tres aspectos del misterio de Cristo: el oro haría referencia  a la realeza de Jesús, el incienso al Hijo de Dios y la mirra al misterio de su Pasión'', dijo el papa Benedicto XVI.





  1. Oro: Es un metal precioso blando de color amarillo. Su símbolo químico es Au, que proviene del latin aurum, que significa '' brillante amanecer''. En la Sagrada Escritura es mencionado como parte de la belleza y riqueza de la Creación: '' Y el oro de aquella tierra es fino'' (Genesis 2, 11-12). En la Biblia se utiliza la imagen del oro para designar la realeza, pero también para manifestar la sabiduria divina es mayor que cualquier tesoro humano. El libro de los Proverbios, por ejemplo, presenta a la sabiduría como una riqueza preferible al oro y la plata (3, 13-14; 16, 16). La belleza del oro también fue utilizada por san Pedro para referirse a cómo debe ser la respuesta del creyente al Señor; pura, acrisolada. Así como el oro se acrisola y purifica con el fuego, la fe se purifica con las pruebas (1 Pedro 1, 7). El oro en la epifanía se refiere a la realeza del Señor y a su gran tesoro que es el cumplir la voluntad del Padre.










  

ESPIRITUALIDAD MISIONERA

 JESÙS SE NOS DA COMO ALIMENTO PARA PERMANECER EN NOSOTROS Objetivo:   Ayudar a los niños y niñas para que comprendan, que para ser testigos...