PARA UN NIÑO MISIONERO, SERVIR CON ALEGRIA ES LO PRIMERO.
Objetivo: Animar a los niños y niñas para que comuniquen a los demás la alegría de servir en la misión, dando testimonio con palabras y gestos, porque Jesús está en sus corazones.
Ambientación: Para este encuentro es importante que el asesor y los niños lideres con anticipación contacten a una familia y a un enfermo para visitarlos, En el lugar del encuentro colocaremos el nombre de este, se tendrá dispuesto una cesta para los alimentos y una bandeja para las frutas ( la cesta es para la familia y la bandeja para el enfermo.)
Oración inicial: Gracias Dios por este encuentro que nos permite vivir, en tus manos ponemos a la familia y al hermano enfermo con quienes compartiremos alegremente tu Palabra y tus enseñanzas, Bendícelos desde ya y abre sus corazones. Amén.
Organicemos el Servicio Misionero: Invitamos a los grupos organizarse y cada integrante coloca en la cesta o bandeja los alimentos o frutas. Luego, con la ayuda del asesor, se les pedirá que entre todos organicen la visita que realizarán. El niño líder deberá asumir como moderador de los grupos y tomará nota de cada elemento que se tendrá en cuenta en la visita ( Se dará un espacio prudencial para este momento.) recomendarles que debe haber un momento para la palabra de Dios, reflexión y el mensaje que se va llevar debe ser de la experiencia de ser misioneros de Jesús y cómo desde la situación de cada uno (familia o enfermo), también están invitados a ser misioneros.
Iluminación Bíblica: Entonces se sentó, llamó a los doce y les dijo: Si alguno quiere ser el primero, que se haga el ultimo el servidor de todos. (Marcos 9,35).
A servir con alegría: Una vez este todo organizado, cada grupo se dirigirá al lugar escogido y realizará la visita designada.
Compartir la experiencia: Después de las visitas, encontrarse para compartir las experiencias, teniendo en cuenta lo siguiente: ¿Cómo se sintieron en esta experiencia? ¿Qué significa para ustedes servir con alegría?.
Compartir fraterno: Para finalizar este momento un compartir fraterno.
Oración Final: Señor, te agradecemos por esta experiencia que hemos vivido tan enriquecedora para nuestra vida misionera, porque hemos compartido tu Palabra, tu mensaje y sobre todo nuestro testimonio, para que los demás se contagien de la alegría de la misión. Señor ponemos en tus manos la vida de las personas con quienes compartimos hoy, nuestra vida y la de todos los misioneros del mundo. ayúdanos y danos la fortaleza necesaria para seguir anunciando valientemente tu Buena Noticia. Amén.
Compromiso Misionero: Durante esta semana compartiré con algunos compañeros de la escuela mi testimonio misionero en la IAM.
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