ESPIRITUALIDAD MISIONERA: INFANCIA MISIONERA

PIDAMOS PERDÓN A DIOS Y A NUESTROS HERMANOS 

COMENTARIO: Queridos niños y niñas, en este tiempo de gracia que estamos viviendo, debemos volver nuestra mirada a Dios y reconocer las faltas que hemos cometido hacia Él y hacia nuestros hermanos. Dispongamos nuestros corazones para vivir este encuentro.

AMBIENTACIÓN:  Vasijas de barro y alrededor una vela para cada integrante del grupo.

CANTO:

HOMBRE DE BARRO

¿Cómo le cantarè al Señor?  

¿Cómo le cantarè al Señor? 

Él està en los montes y en el mar.

Él llena el silencio de la noche en calma 

camina en la ciudad.

No mira en el hombre su color, 

ni mira el dinero, es Padre de todos

y a todos quiere el Señor.

ACTIVIDAD

• Pedir a los niños que se ubiquen en circulo alrededor del símbolo. Entregar a cada uno dos papeles blanco.
• El niño líder y el asesor, realizaràn una corta reflexión sobre la importancia de reconciliarse con Dios y con los hermanos quienes Hemos ofendido.
• Invitarlos a escribir en el primer papel, lo que tengan que decirle a Dios, pidiéndole perdón por la veces  que tengan que decirle a Dios, pidiéndole perdón por la veces que le han ofendido; y en el otro papel, escribir los nombres de las personas a quiénes sientan ofendido, pensando en ellos y deseando su perdón.
• Cada uno pasa y deposita los papeles en la vasija de barro, haciendo una oración espontanea. Después de cada tres intervenciones cantar: Renuèvame.    

Renuèvame, Señor Jesús, ya no quiero,. ya no quiero ser igual;

renuèvame, Señor Jesús, pon en mi tu corazón. (2). 

COMPROMISO:

Durante esta semana, dispondré mi corazón para recibir el Sacramento de la reconciliación. ( Los niños que no ha hecho la Primera Comunión, durante esta semana buscaràn estar en armonía con sus padres y hermanos).


  

ORACIÓN

Gracias, Padre bueno, por el don del Año Jubilar; haz que sea un tiempo favorable, el año del gran retorno a la casa paterna, donde Tù, lleno de amor, esperas a tus hijos descarriados para darles el abrazo del perdón y sentarlos a tu mesa, vestidos con el traje de fiesta. Amén.