INFANCIA MISIONERA: ORIENTEMOS CON AMOR ADOLESCENCIA MISIONERA

martes, 13 de octubre de 2015

ORIENTEMOS CON AMOR ADOLESCENCIA MISIONERA

EMBARAZO EN LA ADOLESCENCIA SEGUNDA PARTE

Generalmente, cuando se presenta un embarazo en la adolescencia solemos centrarnos en la futura madre y en todos los cambios que va a experimentar en este nuevo rol, olvidando al padre de ese bebé, que en el caso de ser un adolescente también experimentará cambios en su proyecto de vida, como por ejemplo: pensar en una vida de pareja, conseguir un empleo, abandonar los estudios, poco tiempo con los amigos. Muchos de ellos se llenan de temor, ansiedad, depresión, se presentan propuestas de interrumpir el embarazo, responsabilizan a la futura madre, experimentan ambivalencia frente a lo que van a hacer, finalmente algunos huyen y otros asumen esta nueva responsabilidad con alegría. Por todo lo anterior, es necesario el acompañamiento no solo a la futura madre sino a este nuevo padre que requiere orientación sobre cómo manejar lo que está viviendo y ayudarlo a solucionar las diversas dificultades que se van a presentar en este nuevo rol de padres... de padres adolescentes.

En nuestras familias se observan diversas formas en que los padres afrontan un embarazo en sus hijos adolescentes, como se mencionó en la pagina anterior, algunos de ellos expulsan del hogar a sus hijos, especialmente a la madre gestante y otros asumen a ese nuevo bebé como un hijo más de la familia.

Estas son algunas pautas para afrontar la llegada de un bebé en la adolescencia, sin embargo cada familia optará por lo que ellos consideren más adecuado.

Ante todo los padres deben revisar el motivo del embarazo: recordemos que puede ser generado por abuso sexual, situación que si se llega a presentar, hay que acudir inmediatamente a las entidades que atienden este tipo de situaciones. Este tipo de embarazo requiere una atención diferente.
Es importante que los padres escuchen a sus hijos acerca de los pensamientos y sentimientos que están experimentando, como también se hace necesario que los padres se tomen el tiempo para procesar lo que está ocurriendo.
Brindar apoyo, desde la escucha, hasta acompañarlos en todo lo referente al embarazo. A los adolescentes se les debe enfatizar que los padres no asumirán la responsabilidad de criar al nuevo bebé, aunque sea su nieto. los padres de familia también deben tener claro que ese nuevo bebé es su nieto no su hijo.
Es necesario que la futura madre acuda al médico para iniciar su control prenatal, tomar las vitaminas y los alimentos que se requieren en el embarazo.
Recordemos que los adolescentes están en la búsqueda de su identidad y que no tienen la madurez suficiente para asumir un matrimonio si no se han preparado para ello. si el matrimonio se realiza es necesario que les brinde acompañamiento y las orientaciones para que esta nueva relación pueda perdurar a pesar de las dificultades que se presentan.
Revisar las condiciones académicas de la madre gestante, para que pueda terminar sus estudios, hay que tener en cuenta si esto es lo que desea ella. También el futuro padre podrá alternar entre el estudio y buscar un trabajo que le permita generar ingresos para los gastos que acarrea el cuidado del bebé. En ambos casos es recomendable alentarlos a continuar con sus estudios.